Manolo García Lleonart y Marina Puche firman la falla grande, mientras que Ceballos y Sanabria repetirán como autores de la infantil
Un gran corazón de varilla trasladará desde el centro de la falla grande municipal de 2023 las emociones y experiencias que hacen que se nos encienda el corazón, mientras que la falla infantil municipal del próximo año propondrá un recorrido por las danzas y bailes de nuestras tierras para descubrir la riqueza festiva y tradicional de los valencianos y valencianas.
El concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de Valencia, Carlos Galiana, ha presidido en el Salón de Cristal del consistorio el acto de presentación de las dos fallas municipales de 2023, firmadas por Manolo García Lleonart y Marina Puche, en el caso de la mayor, y por Ceballos y Sanabria en el caso de la falla infantil.
«Estamos muy felices por poder afrontar por fin un ciclo fallero entero con normalidad, con el calendario habitual y con dos fallas que prometen ser espectaculares y que están avaladas por trayectorias de éxito en el mundo fallero», ha destacado Galiana, quien ha querido poner en valor que por primera vez en la historia una mujer ponga su firma en la falla mayor de la Plaza del Ayuntamiento, que tanto Marina Puche como Manolo García Lleonart asuman este reto después de muchos años de trabajo en el mundo de las Fallas , y que Ceballos y Sanabria vuelven a exhibir su arte en la plaza del Ayuntamiento por tercera vez consecutiva y por duodécima vez en la historia.
Además, antes de dar paso a la presentación de los bocetos, recordó que los presupuestos para estos proyectos se han incrementado este año en un 6 por ciento hasta alcanzar los 217.300 y los 30.210 euros, IVA incluido, respectivamente para la grande y la infantil.
Cardioversión valenciana, de Manolo García Lleonart y Marina Puche
Los artistas de la falla grande municipal de 2023 explicaron que la cardioversión es el procedimiento médico que restaura el ritmo cardíaco normal en las personas que sufren determinados tipos de anomalías en los latidos del corazón. Y eso, pero a la valenciana, es lo que proponen a través de “un gran corazón que nos habla de emoción, latidos y experiencias que crean alegría y palpitaciones en el corazón, emociones que restauran ese latido y momentos por los que el nuestro corazón se abre, creando una metáfora de esta felicidad con el florecimiento de la azahar entre naranjas al llegar la primavera”.
«Alrededor de la pregunta ‘ya ti, ¿qué te enciende el corazón?’ se desarrollará toda la falla», han detallado. “Hemos querido enfocar esa alegría de vivir, de latir y de sentir como visión de nuestra ciudad y de la terreta, con un paseo por el centro histórico en el que sus monumentos como el Miguelete, Santa Catalina o las torres te rodean ”, han descrito.
La falla medirá 20 metros de alto y destacará en ella el corazón de varilla, de 10 metros. Los artistas explicaron que el corazón estará hecho completamente de madera, con la especialidad de varilla, respetando así la ecología y la adecuación de los materiales para crear una crema neta, blanca y tradicional. Además, “con su forma tan orgánica, permite jugar con la dirección de la varilla y las tonalidades, creando grandes claroscuros, y esta forma acompañaría a la espectacularidad de la falla, con un material orgánico, natural y flexible como es la madera, contrastando con los colores de las naranjas”.
Valencianos en danza, de Ceballos y Sanabria
Los artistas de la falla infantil municipal de 2023 proponen con su proyecto «un recorrido por las danzas y bailes de nuestras tierras para descubrir la riqueza festiva y tradicional de los valencianos y valencianas». En este sentido, Ceballos y Sanabria ponen en valor que «una parte importante de la identidad de un pueblo se encuentra en su cultura, que la conforman entre muchas cosas sus fiestas y tradiciones». Por eso se han fijado en las danzas típicas que desde antiguo se realizaban en muchas fiestas de nuestro territorio, “danzas rituales que tienen sus raíces en celebraciones a los dioses paganos y que se cristianizaron después de la reconquista”.
“Las danzas, como las del Corpus, aparte de su carga simbólica y su carácter ritual, tienen una procedencia popular, el baile de las gentes populares. La nobleza y la burguesía acudían a la fiesta como un mero desfile procesional, mientras que las danzas y bailes eran protagonizados por el pueblo que sabía bailar. Más tarde aparece la figura del maestro de danza que se encargará de fijar las coreografías y reclutar a los danzantes, dando paso a unos bailes reglados que han ido perdurando casi hasta nuestros días con la misma estructura”, han explicado.
Entre las danzas presentes en la falla infantil estarán las vinculadas directamente a festividades como la del Corpus de Valencia o las de la Virgen de la Salud de Algemesí. También la diversidad en la indumentaria estará presente en la obra final. “Queremos una falla infantil que nos invite a revivir experiencias, despertar nuestra curiosidad por el folclore propio, a participar de las danzas, que nos acompañe en el tiempo y quede como parte de nuestro recuerdo, como esos muñecos que retrataron nuestras tradiciones festivas más allá del tópico, con personalidad propia y una bonita historia para recordar y divertir”, han afirmado.
fuente e imágenes Web de Junta central Fallera